Cuando en 1979, en el viaje de regreso de la Copa de Oro de Tampa, José Antonio Montenegro sufrió un problema vascular que le apartó de las pistas durante una temporada y ya no volvió a ser el mismo, la platilla del Virgen del Rocío perdía momentáneamente a su principal bastión, pero la circunstancia sirvió para que entre la “tropa” surgiera la figura de Francisco Pérez Muñoz, quien aprovechó las oportunidades que le brindaron para hacerse un sitio en el equipo y en la selección española.
Juan José Berrio Ruíz. De costa a costa

Juan José Berrio
Berrio ya era deportista cuando en España no existía el deporte adaptado. Fue uno de los fundadores del primer club dirigido a personas con discapacidad de la piel de toro, el ANIC de Barcelona, el cual posteriormente se denominaría Instituto Guttman.
Sería en este centro donde Berrio quedó cautivado por nuestro deporte. Primero con la visita del Doctor Guttman en 1965 con motivo de la inauguración del hospital y posteriormente al año cuando una “expedición del ANIC”, en la que se incluía, se desplazó a Stoke Mandeville y comprobaron de primera mano el funcionamiento en materia deportiva de la matriz británica, exportando el sistema al centro recién inaugurado con el Dr. Sarrías como principal promotor.
José Ángel Oliva Bazán. El Henares del Norte
Los inicios del baloncesto en silla de ruedas español están plagados de nombres anónimos que con su entusiasmo y ganas de demostrar su valía superaron todos los condicionantes de una época de transición. Uno de ellos es José Ángel Oliva, uno de los jugadores de referencia durante muchos años de la liga, transmitiendo su impronta a los equipos en que fue militando.
Emilio Sáez Cruz. Un faro en La Mancha

Emilio Sáez en su faceta de político
Después de tres años concluyendo la liga como subcampeón tras el Ilunion de Madrid, el club AMIAB de Albacete dio en Ávila el asalto al trono alzándose con su primer título nacional. Muchas son las personas que han contribuido a esta consecución pero difícilmente podría entenderse sin la aportación de Emilio Sáez, ahora desde los despachos y anteriormente bregando en las canchas.
La metamorfosis sufrida por el club albaceteño en 2013, una vez que tras lograr su enésimo ascenso a División de Honor optaran por dar un giro en su filosofía de club, les ha hecho cambiar su etiqueta del club ascensor para asentarse como uno de los mejores del viejo continente y este año, merecidamente, el campeón de liga. [Leer más…]
Salvador Núñez Fernández. Aires de marinero

Salva Núñez en los JJPP de Seul
El final del ADEMI de Málaga fue una triste noticia para los amantes del baloncesto en silla de ruedas. El paciente llevaba unos años renqueante y en 2005 dejó la competición para no volver pese a algunos intentos de antiguos componentes. Desde que su alma mater Gaspar Anaya se echara a un lado la nave fue navegando sin un rumbo fijo, siendo Salvador Núñez “Salvita” uno de los últimos en abandonarla.
El caso de Salvador Núñez es el de un jugador fiel al verde oliva del ADEMI. Desde que se iniciara con tan solo 18 años en 1977 hasta su retirada en 2005, lució con orgullo el 11 malagueño.