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Antonio Jiménez Cano. Un onubense universal

1 marzo, 2017 por J. Sanjuan 2 comentarios

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A sus casi 77 años, Antonio Jiménez sigue activo en del mundillo del baloncesto en silla de ruedas, dentro de una de las numerosas funciones que este onubense de Bollullos del Condado ha desarrollado a lo largo de su trayectoria deportiva, la de clasificador funcional, algo así como los “super tacañones” del un, dos, tres trasladado al deporte de personas con discapacidad.

La de Antonio Jiménez es una vida dedicada al deporte para personas con discapacidad, primero desde el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla y posteriormente desde la FEDDF, donde ha desempeñado diversas funciones, además del comité de clasificación de la IWBF Europa.

Antonio Jiménez Cano, entrenador, clasificador y Presidente de la CNB

“Erasmus” por obligación en los años 60, mientras trabajaba en Noruega obtuvo el título de profesor de Educación Física por la Statens Gymnastikk – Skole de Oslo, titulación que complementaría con el de Monitor Nacional Polideportivo del Instituto Nacional Educación Física de Madrid (I.N.E.F.) en 1965 y que le serviría para desarrollar su labor en el Departamento de Rehabilitación y Traumatología de lesionados medulares del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla desde el año 1968 hasta su jubilación en el año 2.000, labor que compaginaría en ese periodo con el de Profesor de Educación Física en el Colegio de Enseñanza Superior San Francisco de Paula.

Equipo del Virgen del Rocío en las pitas del hospital

De esta forma, desde su puesto en el hospital sevillano vivió el surgimiento del movimiento deportivo de las personas con discapacidad en España, siendo el entrenador tanto del equipo de baloncesto como de la sección de atletismo, monitor de tenis de mesa, de hidroterapia y el resto de actividades rehabilitadoras y normalizadoras que desde el hospital se programaban.

Virgen del Rocío de Sevilla en una participación en Bélgica

Los Comienzos no fueron fáciles. Al no haber documentación en castellano, para poder formarse tuvo que leer manuales en inglés con las normas, técnicas de entrenamiento, táctica y el resto de aspectos que conlleva el baloncesto en silla de ruedas. La actividad se dirigía a los pacientes de traumatología del hospital. Entonces los procesos de rehabilitación eran mucho más largos, en algunos casos con hospitalizaciones de hasta dos años, por lo que la práctica del deporte les ayudaba en muchos aspectos largamente repetidos. De esta forma se iniciaron jugadores históricos como Emiliano Barrera o Luis Albelda, sumándose también un entusiasta grupo de jóvenes con secuelas de la “polio” formando un grupo de largo recorrido.

Formación del Virgen del Rocío, años 70

Destacable fue la labor dentro del club del Doctor Rodríguez Piñero, quien elaboró los estatutos de forma que pudiera existir el club dentro de la seguridad social, así como conseguir que el centro construyera la pista de atletismo y la de baloncesto dentro del espacio del propio hospital de forma que los encuentros y entrenamientos se llevaban a cabo en esas instalaciones.

Antonio Jiménez con los jugadores internacionales del Virgen del Rocío

Con el Virgen del Rocío disputó las primeras competiciones, denominadas Torneo Nacional de la Seguridad Social, el cual se desarrollaba en régimen de concentración. Desde 1969 hasta su desaparición en 1975, el Virgen del Rocío se adjudicaría tres ediciones, las de 1973, 1974 y 1975.

En el surgimiento de la liga, Antonio Jiménez, con su equipo del Virgen del Rocío tendría un papel protagonista marcando una época en el Bsr nacional junto con el ADEMI de Málaga. Tres títulos de liga se incorporaron a las vitrinas del club hispalense las temporadas 76/77, 77/78 y 87/88 junto a 6 Copas de S. M. el Rey, pero lo más significativo es que en las primeras 21 ediciones de la liga, el conjunto sevillano concluiría entre los tres primeros en 18 de ellas. Una marca al alcance de muy pocos equipos. A la altura de Fundosa-Ilunion y Ademi de Málaga.

Participación de la selección española en Stoke Mandeville, década de los 70

En su andadura en el club del hospital sevillano, Antonio realizó una labor fantástica en cuanto a la formación de jugadores que en muchos casos vinieron a nutrir a otros clubes, como es el caso del surgimiento del ONCE de Sevilla y posteriormente a equipos con mayor poderío económico.

Participantes en los JJPP de 1980

Nunca dejaron de salir jugadores del Hospital Virgen del Rocío, y cuando a mediados de la década de los 90 comenzó el éxodo de los nuevos valores (Lara, Vargas, Torilo o Brincau), junto al envejecimiento de algunos de los puntales del equipo como el mismísimo Manuel Cáceres, el Virgen del Rocío consumó su primer descenso entrando en una etapa de ascensos y descensos hasta que en el año 2001, con el equipo en primera división, tras la jubilación de Antonio Jiménez y el cambio de enfoque desde el hospital propició la desaparición de un club emblemático.

Componentes de la selección española participantes en el Campeonato de Europa de Berlín’93

Durante esos años Antonio Jiménez fue un fijo en el staff técnico de la selección española en todos los Juegos Internacionales de Stoke Mandeville desde 1972 hasta 1990, participó en 4 juegos paralímpicos: Toronto 1976, (Canadá), Nueva York 1984, (EE.UU) Barcelona 1992, (España) Atlanta 1996, (EE.UU) donde España alcanzaría la cuarta posición. Además tomaría parte en 3 Campeonatos de Europa de 1972, 1986 y 1995, y en 2 Copas del Mundo; en Tampa 1978 (EE.UU), 7º clasificado, y en Edmonton 1994 (Canadá) 5º clasificado.

Componentes de la selección española participantes en el Campeonato de Europa de Berlín’93

Desde 1990, a la faceta de entrenador, incorpora la de clasificador funcional IWBF Nivel Oro, la cual todavía desarrolla tras pasar su examen de renovación este mismo año en Malle (Bélgica). En esa función ha intervenido en campeonatos de Europa de Naciones, Andre Vergauwen Cup, Willy Birkmann Cup y Campeonatos de Europa A y B en diferentes Países de Europa, así como en el Torneo afro-Árabe en Argelia 1999.

Selección española en el Campeonato de Europa de Ferrol’91

Una labor, la de clasificador, necesaria para el desarrollo del deporte adaptado, y que levanta pasiones y odios, que genera detractores y seguidores. Medio punto arriba o abajo significa tener cabida o no en un quinteto o en poder entrar o salir de los planes del seleccionador, recayendo en el clasificador la responsabilidad de determinar esa línea divisoria que a veces separa al deportista de la gloria.

Una vez concluida su trayectoria con el club Virgen del Rocío, Antonio Jiménez entra a formar parte de la Comisión Nacional de Baloncesto de la FEDDF en 2001, pasando a presidirla en 2002 hasta 2012. Una década que estuvo marcada por los éxitos de la selección femenina con un segundo y tercer puesto en la Visa Paralimpic Word Cup y de la sub 22 donde se alcanzaron los dos títulos y un tercer puesto europeos, el subcampeonato mundial de la categoría y se fue forjando la base de la actual selección española, plata en los Juegos Paralímpicos de Río, incorporándose a la normativa de la competición liguera la reducción de puntuación para jugadores jóvenes, lo que favorecía su participación en el juego.

Autor de numerosas ponencias sobre deporte adaptado, y baloncesto en silla de ruedas, asistente a diferentes cursos internacionales de entrenadores, su trayectoria ha sido reconocida por la Federación sevillana otorgándole la Insignia de oro y brillantes de la Federación en 2002, así como por el Ayuntamiento de Sevilla a través del “Premio Giraldillo Ciudad de Sevilla 2010”. El más reciente fue el pasado fin de semana en el marco de la Final de la Copa de S. M. el Rey celebrada en Oviedo, donde José Alberto Álvarez, Presidente de la FEDDF le hizo entrega del premio honorífico Juan Palau a su trayectoria deportiva.

Antonio Jiménez, Premio Juan Palau honorífico 2017

Polifacético, amante del deporte en general y del adaptado en particular, familiar, metódico; directo y claro, con sus defensores y detractores, con sus virtudes y sus defectos, Antonio Jiménez Cano es una leyenda de nuestro deporte, una persona sin la cual sería difícil entender en nuestro país el baloncesto de las cuatro ruedas.

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Archivado en: Técnicos y directivos

Comentarios

  1. FEDERICO ramos dice

    10 marzo, 2017 at 12:17 pm

    Y como docente un extraordinario ejemplo de buen hacer que marcó a generaciones de franciscanos.

    Responder
  2. montanaKl dice

    15 marzo, 2017 at 5:42 pm

    Bravo, cette trГЁs bonne idГ©e faut tout juste Г  propos
    montanaKl

    Responder

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